Zürcher Nachrichten - Malasia: Éxito económico único

EUR -
AED 4.260528
AFN 80.036262
ALL 97.724905
AMD 445.558355
ANG 2.075953
AOA 1063.669332
ARS 1461.423778
AUD 1.781414
AWG 2.087901
AZN 1.979362
BAM 1.943002
BBD 2.343663
BDT 141.031083
BGN 1.955111
BHD 0.437258
BIF 3294.243502
BMD 1.159945
BND 1.487105
BOB 8.021168
BRL 6.444535
BSD 1.160755
BTN 99.584078
BWP 15.608195
BYN 3.79868
BYR 22734.919946
BZD 2.331543
CAD 1.59191
CDF 3347.600914
CHF 0.929667
CLF 0.029241
CLP 1122.095865
CNY 8.320275
CNH 8.333595
COP 4678.057762
CRC 585.443909
CUC 1.159945
CUP 30.73854
CVE 110.83295
CZK 24.662861
DJF 206.14515
DKK 7.462507
DOP 69.927313
DZD 150.932673
EGP 57.296987
ERN 17.399173
ETB 158.390219
FJD 2.616147
FKP 0.863417
GBP 0.866665
GEL 3.143138
GGP 0.863417
GHS 12.064494
GIP 0.863417
GMD 82.922522
GNF 10040.483472
GTQ 8.908324
GYD 242.749014
HKD 9.105364
HNL 30.5645
HRK 7.533029
HTG 152.40616
HUF 400.658311
IDR 18874.159357
ILS 3.899507
IMP 0.863417
INR 99.740877
IQD 1519.527813
IRR 48862.678998
ISK 142.684286
JEP 0.863417
JMD 185.498196
JOD 0.82237
JPY 172.713531
KES 150.217787
KGS 101.433238
KHR 4662.978331
KMF 492.541611
KPW 1043.977797
KRW 1608.275523
KWD 0.354861
KYD 0.967329
KZT 610.479013
LAK 25014.211594
LBP 103873.06534
LKR 349.468189
LRD 233.149388
LSL 20.798255
LTL 3.425015
LVL 0.701639
LYD 6.27543
MAD 10.510844
MDL 19.616792
MGA 5138.555999
MKD 61.157181
MMK 2435.516155
MNT 4158.225341
MOP 9.385481
MRU 46.072966
MUR 52.620916
MVR 17.860143
MWK 2014.241346
MXN 21.836717
MYR 4.921064
MZN 74.189837
NAD 20.797881
NGN 1773.683331
NIO 42.628076
NOK 11.897763
NPR 159.334526
NZD 1.950569
OMR 0.445992
PAB 1.160755
PEN 4.130575
PGK 4.794342
PHP 65.920106
PKR 330.17837
PLN 4.264364
PYG 8987.80086
QAR 4.222888
RON 5.076959
RSD 117.131097
RUB 90.538385
RWF 1666.260842
SAR 4.350531
SBD 9.650231
SCR 16.407482
SDG 696.551697
SEK 11.278249
SGD 1.490759
SHP 0.911535
SLE 26.04089
SLL 24323.469058
SOS 662.910339
SRD 43.456756
STD 24008.517411
SVC 10.156106
SYP 15081.429774
SZL 20.797942
THB 37.788099
TJS 11.09671
TMT 4.071407
TND 3.364418
TOP 2.716705
TRY 46.602845
TTD 7.880097
TWD 34.108298
TZS 3030.351722
UAH 48.539787
UGX 4160.595778
USD 1.159945
UYU 47.308398
UZS 14841.495131
VES 134.205421
VND 30318.059698
VUV 138.617077
WST 3.183141
XAF 651.664738
XAG 0.030762
XAU 0.000349
XCD 3.134809
XDR 0.81075
XOF 651.888921
XPF 119.331742
YER 279.952061
ZAR 20.80651
ZMK 10440.898559
ZMW 26.493498
ZWL 373.501783

Malasia: Éxito económico único




Malasia ha recorrido un camino económico excepcional, transformándose de una economía basada en la agricultura y los recursos naturales a una potencia industrial y tecnológica en el sudeste asiático. Este artículo explora cómo el país ha implementado estrategias económicas únicas, combinando planificación estatal, apertura al comercio global y reformas estructurales para lograr un crecimiento inclusivo y sostenible.

En las últimas cinco décadas, Malasia ha reducido significativamente la pobreza extrema, pasando de una economía dependiente de la agricultura y las materias primas, como el caucho, el estaño y el aceite de palma, a un modelo diversificado centrado en la manufactura y los servicios. Desde la independencia en 1957, el país ha ejecutado planes quinquenales que han guiado su desarrollo, promoviendo la inversión en infraestructura, educación y sectores de alto valor agregado. Este enfoque de planificación centralizada, combinado con una economía de mercado abierta, ha permitido a Malasia convertirse en un actor clave en las cadenas de suministro globales, especialmente en la producción de semiconductores y productos electrónicos.

Uno de los pilares del éxito económico de Malasia ha sido su integración en el comercio internacional. Con exportaciones que representan más del 60% de su PIB, el país ha capitalizado su ubicación estratégica y su participación en acuerdos comerciales como la Asociación Económica Integral Regional (RCEP) y el Acuerdo Integral y Progresivo para la Asociación Transpacífica (CPTPP). Esta apertura ha atraído inversión extranjera directa, especialmente en industrias de alta tecnología, lo que ha impulsado el crecimiento del empleo y la productividad.

En 2023, Malasia lanzó el Nuevo Plan Maestro Industrial (NIMP) 2030, una ambiciosa hoja de ruta para fortalecer su sector manufacturero. Este plan busca incrementar la contribución del sector al PIB hasta los 587.500 millones de ringgit, crear 3,3 millones de empleos y elevar el salario medio a 4.510 ringgit para 2030. Además, el país ha priorizado la digitalización, con un enfoque en cerrar la brecha digital entre empresas grandes y pequeñas, promoviendo plataformas digitales y pagos electrónicos, especialmente tras la aceleración de la digitalización durante la pandemia de COVID-19.

El Marco Económico Madani, introducido recientemente, refleja el compromiso de Malasia con una reestructuración económica que combine crecimiento con equidad. Este marco promueve la transición hacia una economía verde, con objetivos como alcanzar emisiones netas cero para 2050, y fomenta la inversión en industrias de alto valor, como la electrónica y las energías renovables. A diferencia de otros países, Malasia ha equilibrado el crecimiento económico con políticas de inclusión, como la Nueva Política Económica (NEP) de 1971, que buscó reducir la pobreza entre los malayos y redistribuir la riqueza, aunque no sin controversias.

A pesar de los desafíos, como la desaceleración del comercio global en 2023 y las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, Malasia ha demostrado resiliencia. Su economía creció un 3,8% en 2023, impulsada por la demanda interna y el sector servicios, y se proyecta un crecimiento de entre 4% y 5% en 2024. La inflación se ha mantenido estable, en torno al 2,5%-3%, gracias a subsidios energéticos y controles de precios, mientras que el desempleo ha vuelto a niveles prepandémicos del 3,3%.

Malasia también ha invertido en mejorar su competitividad global, ocupando el puesto 34 en el Informe de Competitividad Global 2024 y el 33 en el Índice Global de Innovación. Estas clasificaciones reflejan su capacidad para innovar y adaptarse a las tendencias globales, como la digitalización y la sostenibilidad. Además, el país ha fortalecido sus servicios gubernamentales digitales, con un 70-90% de los servicios públicos digitalizados en 2022, aunque aún enfrenta retos en la adopción de soluciones digitales centradas en el ciudadano.

El enfoque de Malasia en la educación y el capital humano ha sido otro factor clave. La proporción de trabajadores con educación terciaria creció del 23% en 2010 al 35,5% en 2023, lo que ha permitido al país competir en industrias de alta tecnología. Sin embargo, persisten desafíos, como la necesidad de reducir las barreras no arancelarias, flexibilizar el mercado laboral y mejorar la protección social para amortiguar el impacto de las reformas de subsidios.

En conclusión, el modelo económico de Malasia destaca por su capacidad para combinar planificación estatal con apertura al mercado, priorizando la diversificación, la sostenibilidad y la inclusión. A medida que el país avanza hacia su objetivo de convertirse en una nación de altos ingresos, su enfoque innovador sigue siendo un ejemplo para otras economías emergentes.